2 componentes de las máquinas para cerrar tapas: Rodillo y Mandril

Las máquinas cerradoras de tapas constan de varios componentes que hacen posible su empleo en el proceso masivo de cerrar recipientes. A continuación te hablaremos de los 2 principales:

 

► Rodillo

 

Estos son rollos de acero tratados de alta dureza. Para la fabricación de los recipientes, están hechos de un acero de herramientas indeformable, para el cierre de la lata son de acero inoxidable para resistir el ataque de la salmuera. 

 

Además de los rodillos, tienen otras designaciones en este sector como: carros, púas o rodillos de bloqueo (o ruedas). Se pueden recubrir con un tratamiento de superficie como el nitruro de titanio. 

 

  • Sección transversal de un rodillo de sellado

 

Están montados en ejes con cojinetes en los brazos que se acercan y se separan automáticamente del plato cuando el contenedor se mueve a la posición cerrada. 

 

Los rodillos giran locamente alrededor de su eje cuando hacen contacto con la tapa del contenedor cuando los brazos que sostienen el contenedor se acercan y el conjunto comienza a girar.

 

La forma y las dimensiones de los perfiles de los rodillos influyen en la estanqueidad del cierre. Hay dos tipos: la primera operación y la segunda.

 

  • Configuración de los perfiles de los rodillos

 

Al menos un rodillo de cada tipo está montado en cada cosedora. La diferencia entre los dos tipos es el perfil de su garganta, ya que están dotados de una garganta con un perfil especial dependiendo de si se trata de una primera o segunda operación, del formato del envase y del calibre de la hojalata.

 

  • Ranura de la primera operación

 

Su perfil es profundo y estrecho, con la curvatura del borde inferior más pronunciada que la del borde superior. Su perfil crea los ganchos del cuerpo y del fondo. Su propósito es enrollar la hoja del ala inferior con la de la solapa del cuerpo del contenedor, insertándose esta última en la primera. 

 

El cierre resultante tiene una forma exterior redondeada y es más bajo en altura que el cierre completado más tarde y no es hermético.

 

  • Perfil de un rodillo de la primera operación

 

En el caso de los selladores de contenedores no redondos, debe establecerse lo más bajo posible para evitar la laminación.

 

  • Rodillos para la segunda operación

 

Su perfil es menos profundo y más alto, con una curvatura más acentuada en el borde superior.

Lleva a cabo el acabado del cierre formado en la primera operación presionándolo contra el mandril para que los ganchos formados estén planchados y rectos. 

 

Perfil de un segundo rodillo de operación

 

Para las máquinas cerradoras de tapas no redondos deben fijarse ligeramente más alto que para las máquinas de sellado de envases cilíndricos.

 

► Mandril

 

Es la placa superior, que está alojada en la cáscara inferior y, junto con la placa de presión del lado opuesto, mantiene el contenedor firmemente en su lugar durante el proceso de cierre de las máquinas cerradoras de tapas

 

Su función durante este proceso es actuar como un yunque sobre el cual los rodillos presionan cuando las alas y el reborde se doblan para formar los ganchos del cierre. 

 

Como ya hemos dicho, el mandril puede girar alrededor de su eje vertical o permanecer estático, dependiendo del tipo de tapón, pero siempre permanece en el mismo plano horizontal, es decir, nunca se mueve verticalmente.

 

Sus dimensiones también influyen en la forma y configuración del sello. Consiste en un eje, que sirve de soporte al mandril, con una brida o un reborde, que se sitúa en el interior de la tapa (cubo) como se ha mencionado anteriormente y cuyas características dependen del fabricante del recipiente. 

 

Este labio tiene una forma ligeramente cónica para adaptarse mejor a la forma de la cáscara y facilitar la expulsión del contenedor cerrado.